Conferencia Manuel Castells: desarrollo urbano y TIC (I)

Como comenté el otro día, ayer asistí a la conferencia de Manuel Castells. Por allí estaba Bambino (muy completo aunque esquemático su resumen) y también fernand0. Supongo que más gente conocida, pero no reconocí a nadie más. Dividiré la exposición en tres entradas por no extenderme demasiado en una...

Empezaré con una valoración de conjunto para pasar a las partes. Lo primero de todo, me impactó la mirada curiosa de Pekka Himanen. Con un auditorio bastante lleno, nuestro amigo el hacker ético miraba escudriñando todo con el ojo avezado de un crítico de trás de sus gafas de pasta. Por otro lado, juzgad vosotros mismos, pero en muchos aspectos me da la impresión que las conclusiones son de bastante sentido común. No quiero decir que sea sencillo llegar a ellas, pero son conclusiones que, en muchos aspectos, no se alejan de lo que una persona con dos dedos de frente puede pensar. En particular, me parece de recibo destacar que el modo de exposición del profesor Castells fue ciertamente ameno y muy didáctico, incluso con puntos irónicos.

La conferencia empezó con una presentación del presidente de Ibercaja, organizadora del evento, y la presentación del profesor Castells por parte del alcalde de Zaragoza, J.A. Belloch, quien destacó la densidad y relevancia de la producción del ponente, calificándolo de hombre de acción y de cartógrafo de la Aldea Global.

Empezó Castells hablando de que sus intereses se centran en la investigación en lo referente a la innovación urbanística y su relación con la mejora de las condiciones de vida de las personas. Y el medio no es otro que las tecnologías de la comunicación (que llamaremos TIC para abreviar). El objetivo de la conferencia era detallar el “estado del arte” en lo que a desarrollo urbano se refiere y el impacto de las TIC en esos procesos.

Lo primero que quiso el profesor Castells es hacer hincapié en la complementariedad de lo local y lo global. Ambos conceptos no tienen sentido por separado. Lo local sin global es provincianismo y lo global sin lo local no crea más que cosmopolitas preocupados de su sueldo y su posición. En este contexto, las ciudades son una dimensión fundamental de la sociedad. Vivimos en una sociedad basada en redes que estructuran el planeta. Cada nodo de esas redes tiene identidad propia, particular, y las TIC son el medio sobre el que se asientan estas Sociedades Red.

La pregunta es inevitable: ¿ Existe relación directa entre las TIC y las formas o procesos espaciales de las ciudades ? El profesor defiende que NO, porque las TIC son un medio pero no existe el determinismo tecnológico. Es decir, ese famoso fin de las ciudades que allá por los 80 se instauró como teoría que defendía que el espacio se diluía (la ausencia de concentración urbana) es rotundamente erróneo. Lo que ha ocurrido es justamente lo contrario.

Primera conclusión importante. Hay una enorme explosión urbana. En estos momentos, más del 50% de la población del planeta vive en ciudades, y para 2050 será más del 75%, lo que representará la despoblación de grandes zonas del planeta. En este contexto, la tecnología permite concentrar y descentralizar, manteniendo la integridad del conjunto, pero no es posible la dispersión porque eso exigiría equipamientos dispersos. Por tanto, existe una concentración cada vez mayor de áreas metropolitanas, que denomina regiones metropolitanas, y que actúan como unidad en términos urbanos, económicos, sociales y culturales. Segunda conclusión.

Estas regiones metropolitanas crecen deprisa en grandes concentraciones espaciales, son plurinucleares (distintos entornos urbanos más pequeños), constituyen un mercado de trabajo por sí mismas y agregan e integran áreas metropolitanas de menor entidad. Ejemplos son Londres (y todo el sur de Inglaterra), París y la zona de la Ile de France o la cuenca del Ruhr en Europa o la South Land de California (que abarca cientos de Km. de costa desde Santa Bárbara a Tijuana en México).

En esta línea, son zonas con una fragmentación total, sin una jerarquía, aunque es importante tener en cuenta que pueden existir ciudades con una fuerte identidad. Cataluña podría ser un buen ejemplo de región metropolitana, porque es una zona integrada en la red global, dispersa en espacio pero articulada y concentrada, quizá facilitado todo ello por la adopción de una lengua que articula el conjunto. Por ejemplo, Castells ha estado asesorando al gobierno chino, que piensa crear diez regiones metropolitanas de 50 millones de personas cada una. Las exigencias de servicios urbanos para soportar esa concentración son de muy alto nivel.

Manuel Castells, Zaragoza, Urbanism, Urbanismo